La Intriga de Jiang Gan Cao Cao, temeroso de que Huang Gai estuviera tramando una estratagema, decidió enviar un espía a Jiangdong para investigar. Jiang Gan se ofreció voluntario, y Cao Cao, complacido, aceptó de inmediato. Al enterarse de la llegada de Jiang Gan, Zhou Yu se alegró mucho y exclamó: -¡El éxito de nuestra estrategia depende de este hombre! ¡Rápido, llamen a Pang Shiyuan! Pang Shiyuan, cuyo nombre real era Pang Tong, era conocido como "Fénix Joven" y era tan famoso como Zhuge Liang. En aquel momento, se encontraba en Jiangdong y ya había sugerido a Lu Su el uso del "Plan de Cadenas" para incendiar la flota de Cao Cao. Zhou Yu le explicó la situación y lo instruyó sobre cómo proceder antes de recibir a Jiang Gan. Cuando Jiang Gan llegó, Zhou Yu lo reprendió por robar cartas en su última visita y, sin darle oportunidad de explicarse, ordenó que lo enviaran a descansar a un monasterio en las colinas occidentales. Pang Tong Engaña a Cao Cao En el monasterio, Jiang Gan estaba inquieto. De repente, escuchó a alguien leyendo un libro de estrategia en la montaña cercana. Siguió el sonido y encontró a un hombre en una cabaña de paja estudiando. Tocó la puerta y, tras una conversación, descubrió que era el mismísimo Pang Tong. Jiang Gan intentó persuadirlo para que se uniera a Cao Cao, y Pang Tong, fingiendo estar resentido con Zhou Yu, aceptó partir con él. Al llegar al campamento de Cao Cao, Pang Tong fue recibido con gran respeto. Después de analizar las formaciones militares, comentó: -La estrategia naval del Primer Ministro es formidable, pero podría perfeccionarse. Cao Cao, intrigado, preguntó: -¿Qué sugieres? -En este río, los vientos y las olas son impredecibles. Tus tropas del norte no están acostumbradas a los barcos y se marean con facilidad. Si unes los barcos grandes y pequeños con anillos de hierro y colocas tablones encima, los soldados podrán caminar como en tierra firme, y hasta los caballos podrán desplazarse sin problemas. Cao Cao se entusiasmó con la idea y ordenó de inmediato la fabricación de los anillos de hierro. Sus soldados también se alegraron al poder moverse sin temor a las olas. Sin embargo, Cheng Yu advirtió: -Unir los barcos los hace más estables, pero si el enemigo usa fuego, será difícil escapar. Cao Cao se río y respondió: -Para una ofensiva incendiaria, se necesita viento. Estamos en pleno invierno, y el viento predominante es del noroeste. Estamos en la ribera norte, ellos en la sur. Si intentaran quemarnos, se prenderían fuego a sí mismos. Los generales lo alabaron por su perspicacia. Zhuge Liang y el Viento del Sureste Mientras tanto, Zhou Yu observaba el campamento enemigo desde la orilla sur. De pronto, una racha de viento agitó las banderas, y la esquina de una de ellas rozó su rostro. En ese instante, Zhou Yu comprendió algo crucial. Su rostro palideció, escupió sangre y cayó inconsciente. Sus oficiales corrieron en busca de un médico. Lu Su, preocupado, visitó a Zhuge Liang en busca de ayuda. Zhuge Liang sonrió y dijo: -Conozco el origen de la enfermedad de Zhou Yu y puedo curarla. Pidó papel y pincel, apartó a los demás y escribió dieciséis caracteres: "Para derrotar a Cao Cao, es necesario el fuego. Todo está listo, solo falta el viento del sureste." Al leerlo, Zhou Yu se sobresaltó y preguntó: -¿Puedes traer el viento del sureste? -Si construyes un altar de siete estrellas, realizaré un ritual para invocar el viento. Zhou Yu se regocijó y su enfermedad desapareció. El Incendio en Chibi Al caer la noche, Huang Gai zarpó con veinte barcos cargados de explosivos y aceite. Cuando los centinelas de Cao Cao los vieron, informaron de inmediato a su señor. Cao Cao, al ver las banderas con el símbolo de Huang, dijo: -¡Es Huang Gai, viene a rendirse! Cheng Yu miró los barcos y advirtió: -Algo no cuadra. Las naves de carga suelen ser pesadas, pero estas se ven livianas. Además, el viento del sureste sopla con fuerza. Debemos ser precavidos. Pero era demasiado tarde. Huang Gai dio la orden y las embarcaciones incendiadas se precipitaron contra la flota enemiga. El viento avivó las llamas, y pronto todo el campamento de Cao Cao estaba envuelto en fuego. Zhang Liao intentó rescatar a Cao Cao en un bote, pero en ese momento, Huang Gai se acercó blandiendo su espada y gritó: -¡Cao Cao, ¡no escaparás! Zhang Liao disparó una flecha que alcanzó a Huang Gai, haciéndolo caer al agua. Han Dang logró rescatarlo, pero la batalla era un caos. Las llamas consumían los barcos, los soldados huían despavoridos, y los gritos de los moribundos resonaban en la noche. Desde la ribera este, Zhou Yu lanzó su ofensiva, mientras que desde la ribera oeste atacaban Han Dang y Jiang Qin. En el centro, los ejércitos de Cheng Pu, Ding Feng y Xu Sheng arrasaban con las tropas enemigas. El fuego y las armas masacraban a las fuerzas de Cao Cao sin piedad. La batalla de Chibi estaba decidida. El gran estratega Zhou Yu, con la ayuda de Zhuge Liang y Pang Tong, había incendiado la flota de Cao Cao y cambiado el curso de la historia.