La Ira de Cao Cao y el Ataque a Xuzhou Cao Cao, establecido en Yanzhou, se dedicó a reorganizar sus tropas y reclutar talentosos estrategas. Pronto, se unieron a él consejeros como Xun Yu, Xun You, Cheng Yu, Guo Jia, Man Chong y Lü Qian, además de formidables generales como Yu Jin y Dian Wei. Con un equipo de mentes brillantes y guerreros temibles, su influencia se expandió por todo Shandong. Un día, Cao Cao envió al gobernador de Taishan, Ying Shao, para traer a su padre, Cao Song, desde su ciudad natal. En su viaje, Cao Song pasó por Xuzhou, donde el gobernador Tao Qian lo recibió con gran hospitalidad durante dos días y luego asignó a su subordinado, Zhang Kai, para escoltarlo. Sin embargo, Zhang Kai traicionó su deber: asesinó a Cao Song y a toda su familia, robó sus pertenencias y huyó a Huainan. Ying Shao, tras una peligrosa huida, logró refugiarse con Yuan Shao. Al recibir la noticia, Cao Cao se desplomó en llanto y, con el corazón lleno de odio, exclamó: -¡Tao Qian permitió que sus subordinados asesinaran a mi padre! ¡Este agravio es irreconciliable! ¡Lanzaré mi ejército y arrasaré Xuzhou hasta no dejar nada en pie! Reunió a su ejército y nombró a Xiahou Yuan, Yu Jin y Dian Wei como vanguardias. Alzando la bandera blanca de "Venganza y Justicia", avanzaron ferozmente hacia Xuzhou, dejando un rastro de muerte a su paso. Tao Qian Busca Ayuda Tao Qian, cuyo nombre de cortesía era Gongzu, era un hombre bondadoso y honorable. Al ver que el ejército de Cao Cao masacraba a su pueblo, lloró desconsolado bajo el cielo. Se dirigió a sus subordinados y dijo: -El poder de Cao Cao es inmenso, y no podremos resistir. Tal vez si me entrego a él, podría salvar a los ciudadanos de Xuzhou. Sin embargo, sus oficiales se opusieron con firmeza. Mi Zhu, uno de sus consejeros, propuso una solución diferente: -Podemos pedir ayuda a Kong Rong, gobernador de Beihai, y a Tian Kai, gobernador de Qingzhou. Mi Zhu fue inmediatamente a ver a Kong Rong para solicitar apoyo. Mientras estaban en plena discusión, el líder de los remanentes de los Bandidos del Turbante Amarillo, Guan Hai, atacó Beihai con un ejército de miles de hombres. Kong Rong, incapaz de defenderse solo, envió una petición de auxilio a Liu Bei. Al ver que Kong Rong confiaba tanto en él, Liu Bei aceptó de inmediato y partió con Guan Yu, Zhang Fei y tres mil soldados para rescatar Beihai. Guan Hai, al ver que Liu Bei tenía pocas tropas, lo subestimó. Sin embargo, tras apenas unos asaltos, Guan Yu lo decapitó de un solo golpe. Aprovechando la victoria, Liu Bei y sus hermanos se lanzaron al ataque, mientras Kong Rong también sacaba sus tropas de la ciudad. Los bandidos fueron derrotados y muchos se rindieron. La Primera Ofrenda de Xuzhou Para celebrar la victoria, Kong Rong organizó un banquete en honor a Liu Bei y, durante la celebración, le propuso que lo acompañara a rescatar Xuzhou. Liu Bei accedió y decidió pedir refuerzos a Gongsun Zan. Gongsun Zan le proporcionó dos mil soldados y al valiente general Zhao Yun. Junto con sus tropas originales, Liu Bei se dirigió a Xuzhou. En la primera batalla, Zhang Fei cargó ferozmente contra Yu Jin y lo obligó a retirarse. Liu Bei entró en la ciudad y fue recibido con gran hospitalidad por Tao Qian, quien, al verlo tan noble y distinguido, se sintió aliviado y lleno de admiración. De inmediato, ordenó a Mi Zhu que trajera el sello de gobernador y se lo ofreciera a Liu Bei. -¡Mi Señor Liu! Usted es descendiente de la familia real Han, y su deber es proteger al imperio. Yo soy viejo e incapaz. ¡Por favor, acepte Xuzhou! Liu Bei se levantó de su asiento e hizo una profunda reverencia. -Aunque desciendo de la familia Han, mis méritos son escasos y apenas pude desempeñar mi cargo como gobernador de Pingyuan. Ahora he venido por justicia, no para tomar su territorio. ¡Si lo hiciera, el cielo no me lo perdonaría! Tao Qian insistió, pero Liu Bei rechazó la oferta. Mi Zhu intervino: Primero derrotemos a Cao Cao. Luego hablaremos de esto. La Retirada de Cao Cao Liu Bei envió una carta a Cao Cao, instándolo a retirarse. Cao Cao, furioso, maldijo a Liu Bei, pero en ese momento, un mensajero le informó que Lü Bu había atacado Yanzhou. Cao Cao, alarmado, no tuvo más remedio que retirarse para recuperar su territorio. Tao Qian, al enterarse de la retirada de Cao Cao, organizó una gran celebración y nuevamente ofreció el gobierno de Xuzhou a Liu Bei. Este, con firmeza, lo rechazó. Tao Qian lloró amargamente. -Si me abandona, moriré sin paz. Kong Rong, Mi Zhu, Guan Yu y Zhang Fei intentaron persuadirlo. Finalmente, Liu Bei aceptó establecerse en Xiaopei para proteger Xuzhou. La Muerte de Tao Qian Poco después, Tao Qian enfermó gravemente. Sabiendo que su fin se acercaba, convocó a Liu Bei y nuevamente le entregó el sello de gobernador, pidiéndole que Mi Zhu y Sun Qian fueran sus consejeros. Aun así, Liu Bei se negó. Tao Qian colocó la mano sobre su corazón y, en su último aliento, falleció. El pueblo de Xuzhou y sus generales rogaron a Liu Bei que aceptara el cargo. Finalmente, cedió y se convirtió en el nuevo gobernador de Xuzhou. Así comenzó una nueva etapa en la historia de Liu Bei y los Tres Reinos.